Son aun muchos los pequeños viticultores que hacen como antes, de la vendimia unas jornadas de trabajo pero de fiesta, en un ambiente familiar, yo, a mis 32 años, todavía recuerdo, muy alejado en el tiempo, ver como mi madre nos subía al majuelo de mi abuelo, en el Carpio, en Fuentespina, en la ladera de un cerro orientada "hacia Soria" y que me dejaba ver al fondo añejos pinares entre campos de cereal que ya había sido segado hacía tiempo, eran días de fiesta para los mas pequeños, ayudabamos poco pero con el calor de las últimas tardes de Septiembre jugabamos en las eras de aquel lugar en las horas que quedaban entre la merienda y la cena, cogíamos los almendros de aquellos viejos arboles que hacían de linde en lo más alto del viñedo, y de vez en cuando, como chiquillos que eramos nos restregábamos un puñado de uvas aprobechando el descuido de alguno de mis primos, la familia compartía días de campo, fiesta y trabajo y era ayudada por vecinos a los que despues se les devolvía por igual en su viñedo, era la labor más agradecida que tiene este cultivo, el ver como despues de podar, sarmentar, azufrar y realizar mil labores de limpieza ente aquellas cepas en vaso, veía mi abuelo la galera cargada con cestos repletos de uvas de gran calidad, sobre todo las de la zona más alta de la viña, las que habían plantado sus padres, mis bisabuelos, y ya estaba listo para bajarlas a la cooperativa, pero la sorpresa venía cuando veíamos que no se habían bajado todas, las mejores, las seleccionadas por el, se las bajaba al lagar de un amigo que tenía una pila pequeñita, y allí entre el y su amigo, elaboraban " su vino", el que más rico le sabía a cada trago.
Es una labor de todos, empresas, instituciones y particulares, el no dejar perder una tradición milenaria, la tradición de la fiesta de la vendimia, por que nunca se disfrutaba más en familia trabajando, y los hombres veían como arrancaban a una dura tierra un mosto que les daría unos tintos de alegría en la Bodega, en los ratos venideros de cuadrilla con los amigos, cuando arreciaba el invierno o cuando en fiestas, entre las bodegas corrían los jarros repletos de tinto para mostrar al vecino quien tenía el vino más "rico".
Duerotur organiza jornadas para mostraros como es la vendimia hoy en día y como se recolecta el fruto tan preciado, la uva, con que delicadeza, selección y mimo se le trata hoy en día a este cultivo, los días 3,4 y 5 de Octubre y 19,20 y 21 de Octubre, tienes con Duerotur una particular fiesta de la vendimia en La Ribera del Duero, consúltanos, es un programa muy especial hecho para disfrutar del enoturismo en su más amplio significado.
Duerotur, especialistas en La Ribera del Duero.
" El hombre en el discurrir de su vida se asemeja mucho a un arbol, cuantas mas hondas y fuertes son sus raices, más fuerte crece"
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